jueves, 24 de julio de 2008
el ciego
Sé que tuviste un hijo. Lo sé por el olor a leche cortada que emana de tu seno.
Toco tu pelo y sigue alborotado, enredado y sucio.
Me llevas del brazo por la calle mientras mi hijo te pesa y puedo imaginar tus ojos desorbitados, tu nariz llena de costras de mocos y polvo y tu corazón lleno de ira porque hoy no nos fue bien. Porque cada vez la gente es más indiferente o porque la ceguera es contagiosa o el mundo se volvió loco y ahora soy yo el que vé.
Siento una mano pequeña que me llama, reconozco al niño y le jugueteo un poco porque sino te molestará y si te enfadas a todos nos irá mal. Porque solo una loca como tú, una zarrapastrosa demente guía a este ciego, que, además de ojos, perdió sus otros sentidos y sin sentido te dió un hijo.
El niño me quiere porque su risa es bonita y uno solo regala a otro algo porque lo aprecia.
Hacía años que nadie me regalaba una carcajada. En realidad nadie me había regalado nunca nada y este niño siempre me regala una carcajada. Es un buen chico.....
CONTINUARÁ-
Por: Nataliuska
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2 comentarios:
Muy bonito,sinceramente tienes un gusto exquisito para conjugar las palabras y sobre todo si logras que nos identifiquemos con cualquiera de los personajes,ya sea sin intensiòn,el texto logra trascendencia.
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